Tres chalecitos en una finca, rodeados de la naturaleza auténtica de Fuerteventura. Alrededor de la casa principal hay un jardín con plantas, que se fusionan a la perfección en la naturaleza. Los tres chalecitos tienen terraza privada con asientos al aire libre y tumbonas. Las terrazas, ofrecen una vista abierta del paisaje hacia las colinas y el mar. Los madrugadores son recompensados con un amanecer inolvidable.